En el árbol conviven hojas de distinto verde.
Algunas muy oscuras y viejas,
otras claras y nuevas…
Algunas grandes, otras pequeñas
Algunas fuertes, otras débiles
Algunas sanas, otras enfermas.
Todas son alimentadas por las mismas raíces
y el mismo tronco..
Todas toman el mismo aire y devuelven el oxígeno que los seres vivos respiramos.
No se comparan entre sí.
No consideran que tienen más o menos derecho que las otras.
No se aniquilan peleando por el nutriente de la tierra o el territorio del aire..
Con-viven
Com-parten
Co-laboran
Se saben árbol, mas allá de hojas.
Nosotros como humanidad hemos perdido esta conciencia, somo hojas olvidadas de nuestro ser árbol.
Pero podemos re-cordarlo!
Hoy
Ahora
Con lo cotidiano
Esa es la RE-EVOLUCIÓN!
despertar a nuestra potencia conjunta, la que nos sacó de reptiles y nos hizo mamíferos.
Esta es otra oportunidad de salir del ensueño traumático del individualismo, pero como todo proceso de descongelamiento requiere de la conciencia para acontecer.
En éste gran cuerpo que es la humanidad como colectivo, hay partes dormidas, partes repitiendo y partes siendo conciente.
Miremos las miles de manifestaciones en el mundo que piden la paz, incluso y sobre todo en Rusia.
Ésta guerra puede ser una oportunidad de despertar del ensueño traumático repetitivo, pero es Juntos! Como el árbol…
Y juntos incluye a esa parte violenta y temeraria que trae la guerra.
El árbol también muere cuando una rama enferma y sus parásitos lo van comiendo de a poco…no muere una rama aislada, muere el árbol todo, tarde o temprano.
Re-evolución.
Con todos.
Diferentes y juntos.
Colaborando y compartiendo.
En Esperanza!
Así sea!
Dra Verónica Molina